Un ser humano es una expresión de vida, esparce luz y refleja el amor en cualquier dimensión que elija tocar. La humanidad no es una descripción física, sino una meta espiritual. No es algo que nos sea dado, sino algo que ganamos. Cualquier idea poderosa es absolutamente fascinante y absolutamente inútil hasta que decidimos usarla. Una vez tomada una decisión, la sigo sin temor, porque es lo mejor que he podido discernir. Cualquier otro rumbo sería peligroso. Si buscas seguridad antes que felicidad, la segunda será el precio que tendrás que pagar por la primera. Una persona no tiene ninguna posibilidad de llegar a su meta a menos que, de algún modo, aprenda a encontrarla solo. Lo único que destroza los sueños es resignarse a las concesiones. (Recopilaciones de Gaviota) Colaboración de Nayle de Alicante España. |