Aunque me tapo los oídos con la almohada y grito de rabia cuando suena el despertador... gracias a Dios que puedo oír. Hay muchos que son sordos. Aunque cierro los ojos cuando al despertar el sol se mete en mi habitación... gracias a Dios que puedo ver. Hay muchos ciegos. Aunque me pesa levantarme y pararme de la cama... gracias a Dios que tengo fuerzas para hacerlo. Hay muchos postrados que no pueden. Aunque me enojo cuando no encuentro mis cosas en su lugar porque los niños hicieron un desorden... gracias a Dios que tengo familia. Hay muchos solitarios. Aunque el desayuno no estuvo bueno y la comida fue peor... gracias a Dios que tengo alimentos. Hay muchos con hambre. Aunque mi trabajo en ocasiones sea monótono rutinario gracias a Dios que tengo ocupación. Hay muchos desempleados. Aunque no estoy conforme con la vida, peleo conmigo mismo y tengo muchos motivos para quejarme... gracias a Dios por la vida. Aunque el dinero no me alcance para zapatos nuevos… gracias Padre celestial, pues tengo pies… hay varios que no tienen. Cuando veo mis manos maltratadas por el trabajo, y mi bajo salario... gracias Señor, pues tengo manos... algunos no tienen. Cuando me quejo del pago de servicios... y veo que no me alcanza... gracias Padre de los cielos.... hay muchos hermanos que carecen de todo. Gracias Padre celestial por el aire que respiro... porque sigo respirando... varios han dejado de hacerlo hoy... son tantas las cosas que tengo que agradecerte. Por cada día que me permites despertar a la vida... si hacemos llegar este mensaje a la gente que conocemos, contribuiremos a hacer de este mundo un mejor lugar para vivir. ¡Gracias a Dios! Recuerda decir "Gracias"... Gracias Señor, por la persona que me envió este mensaje, porque me invita a la reflexión y por oportunidad que me das de compartirlo con otras personas, y sobre todo, por darme amigos tan especiales y maravillosos con quien compartirlo. "S O N R I E S I E M P R E" Colaboración de Georgina Martínez Olvera. |