Es más fácil que una persona tenga éxito después de la ruptura emocional si cuenta con un pasado en el que ha sido eficiente y productiva. Debes rescatar todas aquellas referencias que te recuerden tu independencia, tus triunfos y tus propios logros. Ahora bien, si pasaste de la casa de tus padres a la de tu ex pareja y no tienes ninguna experiencia laboral, nunca es tarde para iniciar algo nuevo, hacer cosas diferentes, para unirse a grupos y crear nuevas amistades. Recuerda que, las crisis son oportunidades para el cambio. Esta época es un buen momento para analizar tus motivaciones: ¿cuáles son los motivos para elegir a tu próxima pareja?, ¿cuáles son las expectativas con las que llegarás a esa relación?, ¿con qué criterio harás tu elección? Todas estas preguntas y otras, debes contestarlas para no cometer los mismos errores. Además, recuerda que más allá del romanticismo de las películas y de las creencias culturales que predican la necesidad de una media naranja, son muchos los que han corroborado la validez de un viejo adagio que dice: "más vale sola mal que mal acompañada". Si bien es cierto que tener una pareja es una de las experiencias más gratas de la vida, no siempre resulta un paraíso. Y elegir una pareja sin haber tenido un proceso de crecimiento, redundaría en lo que dice otro sabio refrán: "el mismo infierno... pero con otro diablo". Colaboración de Arnoldo Araujo Molina. |