Hay personas "Estrellas" y hay personas "Cometas". Los cometas pasan; apenas son recordados por las fechas en que pasaron y en las que quizás vuelvan a pasar. Pero las estrellas... Permanecen para siempre… Hay mucha gente cometa. Pasan por nuestra vida apenas por instantes; no cautivan a nadie, y nadie los cautiva. Gente sin amigos; que pasan por la vida sin iluminar, sin calentar, sin marcar presencia. Así son muchos artistas; brillan apenas por unos instantes en los escenarios de la vida, y con la misma rapidez con que aparecieron, desaparecen. Así son muchos reyes y reinas de naciones, de clubes deportivos o concursos de belleza. Así mismo son hombres y mujeres que se enamoran y se dejan con la mayor facilidad. Así también son algunas personas que viviendo en una misma familia pasan sin presencia, sin existir, sin dar ni dejar nada de sí mismos. Lo importante es ser Estrella. Ser luz. Calor. Vida. Los amigos son Estrellas. Los años pueden pasar, haber distancias, pero en nuestros corazones dejan sus marcas. Ser "cometa" no es ser amigo. Es ser un compañero por instantes, explotar sentimientos, aprovecharse de las personas y de las situaciones; es hacer creer y hacer dudar al mismo tiempo y a la final... La soledad es el resultado de una vida cometa; nadie permanece, todos pasan y nosotros también pasamos por la vida de otros. Es necesario crear un mundo de estrellas; verlas y sentirlas, poder contar con ellas todos los días, ver su luz y sentir su calor. Así son los verdaderos amigos; estrellas en nuestras vidas, se puede contar con ellos. Son refugio en los momentos de tensión, luz en los momentos obscuros, pan en los momentos de debilidad y seguridad en los momentos de desánimo. Al mirar a los cometas, es bueno recordar el no ser como ellos, ni desear el agarrarnos de su cola para seguirlos. Dejar por sentada nuestra existencia, nuestra constante presencia; haber vivido y construido una historia personal. Es bueno sentir que hemos podido ser luz para muchos amigos, y que ellos, a su vez, nos han iluminado. Es bueno sentir que hemos sido calor para muchos corazones, y que esos mismos corazones nos abrigaron cuando el frío nos castigó. Ser estrella en este mundo pasajero, en este mundo lleno de "personas cometas", es un desafío pero la única y mejor forma de haber pasado por esta vida. |