Una pareja de recién casados se mudó a un barrio muy tranquilo. En la primera mañana en la casa, mientras tomaba café, la mujer observó a través de la venta, que una vecina colgaba las sábanas en el tendedero. - ¡Qué sábanas tan sucias cuelga la vecina en el tendedero! - dijo la mujer El marido miró y se quedó callado. Una semana después, nuevamente, durante el desayuno, la vecina colgaba sábanas en el tendedero y la mujer repetía su discurso a su marido. En la segunda y tercera semana, la mujer seguía repitiendo su discurso a su marido, juzgando a la vecina con sus sábanas sucias. Había pasado un mes, la mujer se sorprendió al ver a la vecina tendiendo las sábanas bien limpias, y entusiasmada fue a decir al marido. El marido calmosamente respondió: MORALEJA: Antes de ver la paja que está dentro del ojo de los demás, miremos primero nuestras propias debilidades, flaquezas, limitaciones y defectos. Lavemos los cristales de nuestra ventana del corazón para poder ver con claridad la limpieza del corazón de los demás. |