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| Nuevamente improvisando para la mujer que amo y amare, plasmando en papel palabras que quizá nunca tendré la oportunidad de decirte. Solo pensando y reflexionando sobre mi vida pasada en esta tarde nublada; esta tarde lluviosa; mientras contempló la gran precipitación pluvial, mientras observo la forma en la que desgarradoras gotas golpetean los pequeños y cristalinos charcos sobre el duro y frío concreto, no puedo evitar pensar solo en ti en tu encantadora sonrisa y en la frágil y femenina estética de tu comportamiento. Otórgame pues un espacio en tu pensamiento sueña con lo que podríamos llegar a hacer si estuviéramos juntos si algún día nos damos la oportunidad otórgame un espacio en tu mente, grande, pequeño, 5 minutos, una hora, no importa mientras solo por un momento solo por una vez mi desvanecida y penosa imagen crucen en un fugaz instante dentro de ti. Rogando siempre con fervor y pidiendo incluso a Dios te des cuenta del amor que por ti siento y confío en que un día así será, manteniéndome firme y constante un día espero yo lograr que tú de mí te enamores. Siempre incluso en esa parte obscura de la mente humana poco explorada y misteriosa aun para aquellos eruditos y científicos, me mantendré firme preparado y capaz hasta el borde que la realidad divide de la fantasía a los ricos de los pobres a mi amor del tuyo. Ahora cuando de llover termina puedo ver claramente tu angelical rostro reflejado en esas pequeñas pero numerosas superficie acuosa blancas, transparentes y frías como la piel de una gran serpiente solo ellos testigos de mudos de una ilusión solo ellos conocen el secreto de una realidad de la facilidad de la tristeza. Y agradeciendo a Dios el que me diera la oportunidad de haberte conocido me despido deseando siempre lo mejor para ti y que un día de mí te enamores. Este tormento no terminará hasta que me dejes pasar toda la vida enamorándote. DEDICADO PARA LA MUJER QUE MAS EH AMADO EN MI VIDA GABRIELA RODRIGUEZ M. DEGUILLERMO GARRIDO A. |
