Te extraño de una forma muy singular, es de esa manera que comienzo a recordar, pasajes de mi infancia llenos de felicidad, cuando podía ir de tu mano al caminar.Te recuerdo como un hombre grande, más que por tu estatura por tu gran corazón, quien te conoció vio tu nobleza y me puede otorgar la razón. Te fuiste aun siendo muy joven, quedándome solo la niñez y es que la verdad no alcanzaba a comprender, que nunca te volvería a ver. Y hoy que te recuerdo te extraño Y hoy que te extraño te recuerdo, Los años han sanado algo que ahora entiendo, quizá fue mejor hasta hoy saberlo. Mentiría al decir que no me duele el hecho de no poder verte, pero también mentiría al decir que no estás conmigo, si lo has estado siempre. Y no solo te puedo sentir, formas parte de mi y soy parte de ti, cuando me miro al espejo puedo encontrarte en mi rostro. Cuando escucho mi voz, tiene un timbre impregnado de ti, y cuando veo a mi madre demostrándome su cariño comprendo porque te amo, ahora ve tu reflejo en mí. La vida tiene una meta y tú la alcanzaste muy pronto, quisiera imaginarte a veces como es tu cielo y su entorno. Pero aun continuo en la carrera no se cuanta distancia me falta, estoy seguro que me esperas en la meta, me entregaras la medalla. Seguirás en mi presente, como lo has estado siempre, algún día me tendrás que entregar orgulloso y elegante. Pero mientras la vida siga y mis sueños existan, tu me darás la fuerza tu recuerdo me hará compañía. Pues eres y serás mi padre y yo tu amada hija. Autor: Raúl Cabrera Herrera de León, Guanajuato. |